Cómo garantizar el cobro de un alquiler

Si tienes o has tenido alguna vez una vivienda en alquiler, seguro que sabes lo importante que es seleccionar de forma adecuada a tus inquilinos. Para muchos propietarios poner en alquiler su vivienda acaba siendo una auténtica pesadilla. Lo que prometía ser una nueva fuente de ingresos, acaba convirtiéndose en un verdadero quebradero de cabeza.

De ahí la importancia de pactar un contrato de arrendamiento con las máximas garantías de pago posibles para evitar problemas en el futuro.

Cómo alquilar de forma segura

Es evidente que pueden surgir todo tipo de problemas y situaciones inesperadas cuando ponemos nuestra vivienda en alquiler: rentas impagadas, destrozos en la vivienda, impago de luz, etc. Te vamos a dar algunos consejos que te serán de ayuda para asegurar el cobro del alquiler de tu vivienda de forma que tengas que preocuparte lo menos posible.

Hacer un filtrado de los inquilinos

Es uno de los aspectos principales a tener en cuenta. Dicen que no hay segunda oportunidad para causar una buena primera impresión, pero lo cierto es que, a veces, las apariencias engañan. No nos fiemos de las primeras impresiones sin antes haber estudiado a los potenciales inquilinos de nuestra vivienda.

Internet te puede dar mucha información acerca de la reputación personal, información laboral,…, de tu inquilino, pero no es recomendable que utilices la red como única fuente fiable, puesto que a día de hoy existen determinados servicios dedicados a borrar tu rastro de internet y es posible que no encuentres todo lo que necesitas saber.

Es importante conocer su situación financiera estudiando la solvencia del inquilino estabilidad laboral, contrato de trabajo, nóminas, etc. De esta forma te aseguras de saber si con los ingresos de los que dispone podrá hacer frente al pago del alquiler.

Solicitar una fianza

La Ley de Arrendamientos Urbanos contempla la obligatoriedad de la prestación de una fianza en metálico que será equivalente a una mensualidad de la renta. En cualquier caso y para mayor seguridad, puedes solicitar dos o más mensualidades.

Pedir un aval

Una de las formas de asegurar el cobro del alquiler es solicitando un aval bancario o un aval personal al futuro inquilino. El aval bancario es un documento que debe solicitar el arrendatario en la entidad bancaria y que puede corresponder a varios meses de alquiler. Acostumbra hacerse de 3 o 6 meses. Gracias a ello, en caso de impago, puedes ejecutar el aval.

El aval personal se establece a través de una tercera persona – que no tiene por qué vivir en la vivienda – que se compromete a responder en caso de impago del alquiler por parte del inquilino. Aquí puedes reclamarle la deuda o bien al inquilino o bien a su fiador.

Arbitraje en el contrato de alquiler

Ambas partes firman un anexo en el momento de formalizar el contrato en el que se acuerda que, en caso de conflicto o impago, se someterán a la decisión tomada por un árbitro imparcial. El aspecto negativo de esta medida es que no es obligatorio para ninguna de las partes cumplir con lo establecido.

Contratar un seguro de alquiler

Otra de las opciones posibles es contratar un seguro contra impago del alquiler para garantizar el cobro de las rentas.

Una de las mayores ventajas que tienen este tipo de seguros es que las compañías, antes de aceptar el seguro, estudian muy bien al futuro inquilino, por lo que si aceptan se sobreentiende que las posibilidades de que sea un inquilino problemático se reducen.

La mayoría de estos seguros de impago de las rentas hasta en 12 meses y de los desperfectos que haya podido causar el inquilino en tu vivienda. También cubre la defensa jurídica en los conflictos que puedan venir derivados del alquiler, entre otros aspectos.

Con estos consejos para asegurar el cobro de tu alquiler, podrás obtener el máximo beneficio de tu vivienda sin preocupaciones gracias a todas las opciones que te ofrece el mercado.